sábado, 11 de diciembre de 2010

:comer en Manhattan

Para comer en Manhattan hay donde elegir hasta aburrirse, dependiendo de la zona por donde te muevas, el dinero que te quieras gastar, el tipo de cocina que te apetezca... Aquí os reseño unos cuantos lugares donde nos paramos a comer, lugares que nos gustaron tanto como para recormendarlos a cualquier amigo. Los precios no son excesivos en ningún caso, oscilando el cubierto entre los 10 y los 20$ (al cambio en euros, son bastante económicos).

MoMA -11 West 53 Street. A parte de museo, por el (enorme e impresionante) edificio tienen repartidas algunas cafeterías y rincones de esparcimiento. Además, al menos, un par de restaurantes, uno con aspecto lujoso, y otro, en el que comimos nosotros, más bohemio.

El local está amueblado con mesas corridas (con perdón de la expresión) en donde te sientas en los huecos que encuentres, codo con codo con los demás comensales. El servicio es rápido y amable (esto último es una constante en New York) y la carta se compone de platos ligeros: ensaladas, tostas, pasta... Comida de autor, pero sin pretensiones y en un entorno inmejorable.

Lombardi's
- 32 Spring Street (Little Italy) Considerada la primera pizzeria de la ciudad. Las pizzas tienen un tamaño considerable (las de la foto son el tamaña "pequeño"), con lo que son ideales para compartir. Productos naturales, masa casera... una pizza muy rica. El ambiente es agradable, y el aspecto se aleja de los acabados de restaurante de cadena, pero tampoco es una tasca familiar.
Ojo con la propina, que en algunos locales no va incluída en la factura (como fue nuestro caso aquí), y según cómo les pilles el día, los camareros pueden ser muy poco comprensivos con según qué despistes.

Friend of a farmer- 77 Irving place. Este sítio es famoso por su brunch (esa comida que los americanos se inventaron entre el desayuno y el almuerzo, pero que no se parece en nada a nuestro vermú y aperitivo de toda la vida), aunque nosotros fuimos a media tarde: con el cambio horario ya no sabíamos si era un almuerzo tardío o una cena temprana; da igual, el local estaba lleno.
El sitio desprende encanto y autenticidad por los cuatro costados, con un comedor en el primer piso con chiminea y cestos de productos agrícolas en cada rincón. La comida, sencilla pero deliciosa, toda cocinada con productos naturales y ecológicos. Yo me pedí un sandwich de pollo con batatas fritas, y os aseguro que fue uno de los bocadillos más deliciosos que comí en mi vida. Y no he comido pocos.

Carnegie Deli
- 854 7th Avenue at 55th Street. Local famoso por su pastrami. Tiene un glamour decadente, como de superviviente de otra era más gloriosa, con las paredes completamente cubiertas de fotos de celebridades que se pasaron por allí a comer (bueno, celebridades que pueden variar desde Christopher Lee hasta el gobernador de Arkansas, que con todos mis respetos, lo conocerán en Arkansas adiós y gracias). Le preguntamos al camarero cuál era la persona más famosa que había comido allí, y el tipo nos debió de entender la más famosa de ese día, y nos dijo que dos horas antes había estado Jack Nicholson.
Los bocadillos de pastrami, como saltar en paracaídas, están bien como experiencia, pero como costumbre me parece un sinsentido. Como ninguna persona en sus cabales se puede terminar uno entero, te cobran tres dólares extra si pides uno para compartir entre dos. A eso se le llama previsión. Lo que te sobre, eso sí, te lo puedes llevar en una bolsita.
El cúlmen, el Everest del sandwich de pastrami es el Woody Allen (ver foto). Sospechamos que no se llama así porque Woody lo coma habitualmente, ni porque lo hiciera mundialmente famoso con su película Broadway Danny Rose. Es porque lleva el equivalente al peso de Woody Allen en pastrami. Sólo dos personas se lo han logrado terminar, según el camarero, y ninguna era Soon-Yi.

Ess-a-Bagel - 831 3rd Avenue /359 1st Avenue. Los bagels han sido una de mis perdiciones en este viaje. Son una especie de rosquillas de pan que te abren por la mitad y te las rellenan con algún producto, normalmente una convinación de untable con ahumado y verdura, como queso philadelphia con salmón y tomate, por ejemplo.

Este local es mítico, y se nota: la cola de gente caracolea a lo largo de todo el establecimiento, una clientela autóctona y veterana y unos dependientes más veteranos y resabiados que convirtieron el hecho de hacer el pedido en toda una experiencia. Entre tantas variedades de panes y rellenos, al final me decanté por lo más básico: pan normal calentado en la plancha, y (una generosa capa de) queso de untar. Eso sí, no tengo ni idea de por qué había pasas en mi pan. Si no quieres que te arrastre la marea humana, vete fuera de las horas punta (nosotros fuimos a la hora del desayuno).

Sylvia's
- 328 Lenox Avenue. Famoso restaurante del Harlem para comer la Soul Food (comida sureña hecha por negros). A la Sylvia debe de irle bien el negocio, porque ya posee tres locales adyacentes, así como sus propios productos en el mercado (sobre todo salsas). La base de la comida es bastante sencilla, buenas piezas de carne, sin más; el secreto está en el condimento, especiado y sabroso. Con cada plato, además, se incluyen dos guarniciones a elegir entre una buena docena.

No puedo decir si sabe a auténtica Soul Food, pero entre la clientela no había turistas (a escepción de nosotros), y sí muchos afroamericanos de la zona y un par de predicadores que parecían habituales, lo que me dio buena espina (sí, se que ya no te puedes fiar de estos indicativos. Antes se decía que donde hubiera camiones aparcados delante, es que se comía bien; pero un experto en el tema me dijo que donde hay camiones aparcados delante, es que hay un parking grande. Sin más).
Y sin más, yo también me despido. Buen provecho.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

delicius!!!!!! junto con algún indio del Village y un mejicano en la 2th... mmmm.... cenamos fuera?

Tomás Serrano dijo...

He leído esta entrada y las del libro de películas de animación y la basura de los contertulios. Me ha gustado. Este de comidas es de tenerlo muy en cuenta y fiable. Pero, si me lo permites, no descuides alguna palabra en la que se te ha colado una "v" impostora...

toni bascoy dijo...

Jajaja... gracias por el consejo, y por pasarte por aquí. Siempre serás vienbenido...

David (Intramuros) dijo...

Excelente guía culinaria. La tendré en cuenta en mi futurible y ansiada escapada a "La Ciudad" por excelencia.

Por cierto ¿Te internaste algo en el rollo Comic Shops?.

toni bascoy dijo...

Ah, perdona que tardara tanto en contestar, hace tiempo que no miro tan abajo. Gracias por lo primero, y en cuanto a lo segundo, le dediqué poco tiempo, teníamos muchas cosas que hacer. Fui a Forbbiden Planet (Broadway 840, en Union Square), y está muy bien, gran surtido que incluye todo el espectro viñetil, desde el gafapastismo a los superheroes, además de merchandising vario. Justo al lado, como a tres o cuatro portales, está la librería Strand, que también es muy muy recomendable. Un ambiente muy acojedor, varios pisos de estanterías repletas de libros, secciones de arte y cómic potentes, amplio surtido de segunda mano... y unas bolsas de tela preciosas que seguro que conocerás. Yo me compré las diseñadas por Seth y por Tomine, pero había muchas más.
Y esa fue mi experiencia. Ten en cuenta que íbamos varias parejas, y a los demás les interesaban los cómics tanto como los bares leather, con lo que tuve que escaquearme una mañana para hacer lo mío.
Espero que esta información te sirva de ayuda, y no dudes en visitar la ciudad: sólo pasear por sus calles es un subidón.
Un abrazo!